Actualmente, según se desprende de este estudio -para el que se han realizado un total de 1.736 entrevistas a pacientes en tratamiento activo en 55 hospitales, tanto públicos, como privados concertados-, hay muchos factores que agudizan esta desigualdad.  El número de unidades de radioterapia que hay en España, la distancia entre los centros hospitalarios y los domicilios de los pacientes, los tiempos de espera, los costes asociados a recibir este tratamiento, las ayudas públicas, etcétera. Además, hay que tener en cuenta que no en todas las provincias hay unidades o que, incluso en aquellas que disponen de una de ellas, pueden encontrarse a cientos de kilómetros del domicilio del paciente.

Costes directos e indirectos de la radioterapia

1. Alojamiento durante el tratamiento

El primer coste asociado al tratamiento, y uno de los que potencialmente pueden llegar a plantear más dificultades para los pacientes, es el derivado de la necesidad de buscar un alojamiento durante el tiempo que dure el tratamiento. Un 6% del total de pacientes entrevistados se ven en la necesidad de cambiar de domicilio para poder asistir a las sesiones de radioterapia prescritas. Este porcentaje se eleva hasta un 18% en Baleares o un 17% en Canarias. Así, el coste medio de este cambio temporal de domicilio es de 1.092,2€ de media.

 

Principales costes

 

2. Desplazamientos

El coste por desplazamiento a la unidad de radioterapia es uno de los más frecuentes que las personas enfermas debe afrontar para recibir el tratamiento, siendo lo más habitual el uso de un vehículo privado (propio o de un familiar). Asociado a este coste está el tiempo invertido o los gastos derivados del estacionamiento. En una media de 15 sesiones, recorriendo más de 100km, una persona con cáncer gastará 231,8€ invirtiendo una media de 3 horas por sesión.

El uso del transporte no urgente, ambulancia, es más alto en aquellos pacientes que residen a mayor distancia de la unidad de radioterapia y quienes menos disponen de un transporte alternativo. Los principales problemas asociados son principalmente la dificultad de viajar con acompañante y los tiempos de espera. La inmensa mayoría de quienes usan la ambulancia como medio de transporte comparten el trayecto junto a otros pacientes; lo que implica un tiempo de espera considerable. Casi un 30% de las personas con cáncer deben hacer un trayecto diario de entre una y dos horas para poder acudir a su tratamiento; mientras que para otro 30% estos trayectos superan las dos horas, llegando incluso a alcanzar las cuatro horas de viaje solo para el desplazamiento.

 

Situación actual radioterapia

 

3. Otros gastos

El resto de los costes asociados al tratamiento de radioterapia inciden en mayor o menor medida en la persona enferma. Así, el 100% de los pacientes hace gasto en medicamentos y productos farmacéuticos para paliar los efectos secundarios; el 27% asume costes de comidas y tentempiés; un 6% necesita de los servicios de otros profesionales médicos; el 10% necesita contratar a personas para que les ayude en su viuda diaria; y el 31% tiene una pérdida de ingresos por dejar de desemplear su trabajo.

Recomendaciones para mejorar el acceso al tratamiento de radioterapia

Desde la AECC no solo se exponen los datos para entender esta problemática, sino que también se trabaja para mejorar la situación de estos pacientes. No solo a través de sus ayudas, sino también con la propuesta de recomendaciones de mejora.

Así, este informe concluye con ideas como la necesidad de hacer una mejor difusión, por parte de las consejerías de salud, de las prestaciones a las que tiene derecho una persona con cáncer; para así facilitar el acceso a los tratamientos oncológicos y la forma de solicitarlas. Así como incluir en la prestación farmacéutica del Sistema Nacional de Salud aquellos fármacos o productos sanitarios que están indicados para paliar secuelas del cáncer y/o tratamientos oncológicos.

También se reclama la actualización de la normativa relativa al reembolso de los gastos de desplazamiento, manutención y hospedaje en las CC. AA, que no lo han hecho en los últimos 5 años.

No olvida otras cuestiones como la regulación de anticipos de las ayudas en todas las Comunidades Autónomas en el caso de pacientes oncológicos con ingresos familiares insuficientes; o la aplicación de cheques comida para los beneficiarios y acompañantes que pasen largo tiempo en el hospital para recibir tratamiento.